La diputada reelecta por la región de Coquimbo del Partido Comunista no elude la autocrítica tras la derrota de la candidata de su colectividad, Jeannette Jara en las presidenciales frente al ex parlamentario, José Antonio Kast y reconoce que uno de los factores es que el estado llegó tarde o simplemente no estuvo en los territorios alejados.
Un término de año 2025 con dos caras es el que está cerrando la diputada del Partido Comunista, Nathalie Castillo. Por un lado alcanzó la reelección como parlamentaria con una votación importante que le permitió colaborar en alcanzar un segundo diputado para su sector (Bernardo Salinas Maya), pero por el otro debió enfrentar la dura derrota de la abandera del PC y la coalición oficialista, Jeannette Jara ante el republicano, José Antonio Kast.
En entrevista con periodicoeldain.cl la legisladora hace una dura autocrítica que intenta resumir en el abandono que el Estado tuvo con los sectores alejados.
La legisladora igualmente profundiza en la experiencia como parlamentaria en una zona históricamente de izquierda y como fue adquiriendo mayor madurez. “Ha sido una experiencia de menos a más, pero también de una madurez política que se ha ido notando en la forma de cómo vamos planteando una estrategia legislativa que le haga sentido a la ciudadanía. En esa lógica hay un crecimiento sustantivo y siempre habrán autocríticas de la forma que no se ha podido aplicar de mejor manera nuestro trabajo y lo que nos mandata la Constitución, pero lo evalúo de manera positiva y posicionándonos como una tercera mayoría regional y la segunda del oficialismo y también da cuenta que tuvimos una cercanía real efectiva con las comunidades sin tener grandes nichos o bolsones de alcaldes o alcaldesas en la región. Por lo que ese modelo de desarrollo territorial muy vinculado al crecimiento de áreas más rezagadas por parte de la política en los últimos años, creo que nos hizo también tener un sello de confianza respecto del trabajo, por lo que ha sido una experiencia muy importante, pero también de mucha responsabilidad”.
-En los últimos 30 años al Partido Comunista le ha costado reinsertarse en el ámbito electoral, sin embargo, actualmente han recuperado los espacios y posee un grupo importante de parlamentarios, ¿Qué factores han incidido para este repunte?
“Lo primero es rescatar lo que pasó post dictadura que fue la lucha contra el sistema binominal que dejó a los partidos más pequeños incluso fuera de la institucionalidad por tanto tiempo y lograr acuerdos como fue el pacto por omisión para poder llegar a tener escaños parlamentarios dando muestras de que era posible tener candidatos comunistas abriéndose las puertas para diversas generaciones, pero, sobre todo, para quienes tenemos el mensaje claro respecto de cambiar las condiciones de vida de los trabajadores (as) y eso va generando la confianza y hacer un crecimiento de una bancada que ha ido creciendo en los últimos 12 a 13 años lo que habla del desempeño que tenemos en la Cámara de Diputados y en diversos espacios donde hemos podido liderar. Hablo de alcaldías con medidas innovadoras y populares como las que en un minuto tuvo el ex alcalde Daniel Jadue (Recoleta) que se replicaron en algunas comunas y en los gobiernos locales con concejalías y así también con el gobierno regional a través de los consejeros (as). Hemos podido construir en estos años una red de confianza con las personas que creen que la izquierda está representada dentro del PC y en la Región de Coquimbo de arraigo de izquierda por mucho tiempo que hemos ido recuperando poco a poco. Si bien en esta elección no nos da grandes números principalmente en la elección de Jeannette Jara, también creemos que hemos ido recuperando nuestros nichos más históricos, principalmente en el Choapa lo que nos tiene bastante contento. Esas pequeñas recuperaciones, a propósito de esta ‘debacle’ electoral que tuvimos durante las elecciones pasadas, sin embargo, eso es parte de la democracia y hoy por hoy somos las personas que estamos no solamente presentes en estos espacios institucionales, sino que también hay una alta representación en sindicatos, entidades de funcionarios públicos y la misma central de trabajadores y eso configura un buen trabajo de conjunto colectivo como siempre se ha destacado el Partido Comunista”.
-¿Cómo ha visto desde adentro el tema que en el PC conviven las corrientes de los ‘duros’ y blandos o cree que se ha formado un mito?
“Bueno soy miembro del Comité Central por dos periodos consecutivos y creo que esa dicotomía o esa contradicción generacional no existe, si hay formas de plantear nuestra política. Mi forma de actuar dentro del PC donde llevo militando 22 años (ingresó el 2003) ha sido muy de la línea que decide el congreso y eso es lo básico y mínimo quienes tenemos la conversión ‘marxista-leninista’ que son los ideales que nos rigen y si hay personas que se alejan de acuerdo a la prensa o propias actuaciones, creo que hay matices. Pero, eso no significa que no exista la unidad de acción o la disciplina única que nos ha caracterizado que también nos hace ser un partido centenario. Sin embargo, soy de la lógica de mantener siempre los principios básicos y los postulados que hemos tenido durante toda nuestra trayectoria de partido y, además, que refrendaron los compañeros (as) en el último congreso. No estar de acuerdo con ello sería no formar parte de la militancia y retirarme de una colectividad. Entonces, quienes no se sienten cercanos a aquello también podrían evaluar esa expectativa, pero no es algo que hoy día esté cursando en la discusión del comité central y tampoco el partido en la interna”.
AISLAMIENTO A JARA: UN MITO
-Cuando habla de la ‘debacle electoral’, es de las que culpa a su partido de haber dejado sola a Jeannette Jara y sobre todo al sector más duro del partido o cree que el responsable sería el gobierno?
“Lo descarto totalmente porque ella fue primero proclamada por el Partido Comunista y el pleno del comité central, posteriormente la hemos acompañado y creo que el PC si bien abrió y compartió la candidatura hacia la centro izquierda de nuestro país, incluso, la democracia cristiana, no tuvimos en ningún momento un alejamiento ni siquiera en el acompañamiento propiamente tal. En la Región de Coquimbo la candidatura de Jeannette Jara en la primera vuelta la lideramos como partido Comunista y principalmente la diputada a la reelección Nathalie Castillo (…) Fuimos muy respetuosos de la toma de decisiones que hizo Jeannette Jara y ella también muy generosa con nosotros en la medida que hicimos una campaña de conjunto. Los que estuvimos siempre en la primera línea bajo cualquier circunstancia fue el partido Comunista, pero también agradecemos a las demás fuerzas de la coalición que colaboraron para que ella pudiera tener un porcentaje importante”.
-¿Cuanta responsabilidad tiene el Gobierno del Presidente Boric, a quien se le acusó de haber tenido demasiado protagonismo y enfrentar el peso de ser la candidata de la continuidad ?
“La debacle la tuvimos en materia más comunal, en los gobiernos regionales y locales y creo que hay responsabilidad compartida y eso es parte de las críticas y autocriticas que tenemos que realizar como coalición y en el fuero de cada persona que tiene una responsabilidad política de cara a no cederle a la derecha ningún espacio y ahí faltó estado en muchos lugares, al menos en esta región de Coquimbo y en otros sectores del país donde se hizo más dificultoso llevar las políticas positivas que ha realizado el Gobierno y entregar la información a tiempo o poner proyectos de ley que le hacen bien a la ciudadanía y en ese sentido tuvimos una falla estratégica y eso son cuestionamientos que se realizan. A veces se entregó las garantías máximas a una oposición que sabíamos que no iba a responder de la manera que quisiéramos como la Reforma Tributaria dejando de lado a quienes estábamos trabajando codo a codo por la transformación de nuestro país y ojalá con una continuidad del gobierno. Hay que sacar esas cuentas que a lo mejor son duras, pero hay que tener la honestidad y sinceridad. A veces el estado llegó atrasado y el gobierno no categoriza parlamentarios de primera, segunda o tercera categoría y eso también pasa la cuenta cuando las personas quieren retribuir ese cariño y agradecimiento hacia una candidatura por lo que aquí hay responsabilidades compartidas”.
EL COSTO DEL PERSONALISMO

-¿Cuál es la autocrítica que se hace el PC y usted como militante de esta colectividad?
“Obviamente ya estamos asumidos en la derrota a una semana de lo que ha sucedido, este fin de semana (sábado 20 de diciembre de 2025) tenemos el pleno del Comité Central y es ahí donde vamos a realizar todas nuestras declaraciones, pero hoy creemos que necesitamos tener mayor certeza de la forma en que vamos a hacer oposición. Creemos que es necesario juntar a todas las fuerzas y las voluntades y ha primado mucho en este último tiempo las figuraciones individualista o personalistas por sobre lo colectivo y hacer fuerza de oposición. Creo que las agendas individuales no le hacen bien a la construcción de una fuerza de mayoría social, sindical o de trabajadores (as) y por eso también pasa mucha autocrítica y críticas hacia nuestro sector. Las agendas personales no dejaron avanzar de conjunto”.
-¿Los más de 5 millones de votos que sacó Jeannette Jara es un buen colchón para mantenerla en vitrina para desafíos futuros o será marginada de la primera línea y sufrirá el efecto de Alejandro Guillier el 2017?
“Si bien estamos en un momento bien líquido en la toma decisiones lo principal es poder liderar un espacio fuerte en términos de conglomerado para poder hacer freno a las políticas regresivas que se está instalando desde ya. Por ejemplo, esta oficina presidencial electa de José Antonio Kast y me refiero a todo lo que se ha anunciado y no sabemos por qué no ha habido consistencia entre el relato de su programa ni lo que planteó de manera verbal, pero las urnas hablaron y es necesario tener una coalición que sea capaz de avanzar con miras a recuperar un gobierno con liderazgo, pero que no piensen en si mismo, sino que en el pueblo de Chile”.
-¿En lo personal se sentiría más cómodo en una alianza con el PS sin el frente amplio?
“Hoy día ante una ultraderecha que conocemos en su pasado, pero como podría actuar hoy, creemos firmemente que se requiere una alianza amplia como lo realizamos durante el Gobierno del Presidente Gabriel Boric sin gustos personales. Acá tenemos que avanzar con una fuerza que realmente quiera construir y transformar nuestro país, mantener las políticas progresivas en función de la justicia social, lo que se hizo en materia de pensiones por ejemplo, copago cero, vivienda donde pudimos establecer una política de vivienda como plan de emergencia habitacional como una política de estado y esas cosas son las que se requieren para mantener esa sintonía y ojalá superar ese porcentaje que tuvimos en la elección presidencial y se debe ceder y hay partidos que no ceden frente a la amenaza de la derecha. Entonces, hoy se requiere (coalición) lo más amplia posible, pero sin ningún tipo de renuncia ideológica porque es una situación bastante compleja la que vamos a cursar desde marzo en adelante”.
-¿Usted es partidaria de darle un tiempo al gobierno de Kast o como lo planteó la diputada Pamela Jiles, salir a la calle luego y hacerle la vida imposible al Mandatario electo?
“Hemos dicho que no vamos a estar a disposición de ninguna política regresiva para las mujeres, para los trabajadores, ya se han anunciado recortes fiscales y cierres de ministerios que son muy importantes para el desarrollo social. Hablamos de una forma de gobernanza que si bien tenemos luces de lo que fue en el pasado, vamos ver como fluye y se comporta, pero formamos parte de la institucionalidad del parlamento, por lo tanto ahí tenemos las herramientas fiscalizadoras, acusatorias y además legislativas, a pesar de que somos minoría para poder hacerle frente a un gobierno de ultraderecha, pero a diferencia de la diputada Jiles (Pamela) nosotros tenemos una consecuencia de trabajo, un sello responsable y no solamente de panfleto publicitario y farandulero televisivo, sino que hablamos realmente de construir una política seria. Por eso somos muy respetuoso de las definiciones que vayamos a tener en el comité central el fin de semana”.
-¿Ante un gobierno de José Antonio Kast catalogado de ultraderecha, está la tentación de salir rápidamente a la calle para liderar protestas y cuestionar todo o como periodista cree que se debe ser más objetiva y esperar que se instale?
“Me tocará ser oposición dentro del rol de diputada, pero durante este gobierno también cuando veíamos una política que no resguardara los derechos humanos o que fuera en contra de los intereses de las mayoría, también estábamos claros para oponernos. En consecuencia esperaremos el desarrollo de su instalación y estaremos alerta esperando como responder bajo las herramientas constitucionales que tenemos, pero también no descartamos hacer un llamado a las diversas dirigencias sociales de mujeres, trabajadores (as) y estudiantes para que estemos en un estado de alerta frente a cualquier situación que se pueda generar. Sin embargo, hoy nos toca ver esta instalación, conocer el detalle de cómo se va a configurar. Es una imagen muy fuerte y violenta por ejemplo verlo con el presidente de Argentina (Javier Milei) con una motosierra. Eso nos recuerda los peores momentos de nuestra historia reciente de la violación de los derechos humanos, por lo tanto sí estamos en un estado de latencia, pero también de alerta”.
-¿Cómo se explica el término del clivaje del Si y el No y que la gente terminó votando por quien apoyó a Pinochet y respaldó el Si?
“Es un retroceso de memoria por una parte, pero también es algo que hoy día están acuñando muchos republicanos. A nosotros nos identifica más la batalla de las ideas, pero también la batalla cultural y eso no se lo podemos cargar al pueblo de Chile, sino que también hacerse cargo de cómo entregamos en bandeja ciertos nichos a la derecha o lugares donde no hemos ido, por eso hablo de que no ha llegado el estado o como orgánica para poder como partidos políticos solamente en ámbitos electorales y no para la construcción de un pensamiento crítico. Creo que hay mucha autocrítica al respecto. Es muy potente que estas personas, cómplices muchos de la dictadura civil-militar o también ex generales que estuvieron involucrados en la violación de los derechos humanos del 2019 hoy día lleguen al parlamento es un escenario adverso para las agrupaciones de derechos humanos, pero también para las personas que nos identificamos como defensoras del derecho de las personas y férreos opositores a Pinochet y eso marca una situación bastante compleja de cómo recuperar la conciencia y el pensamiento crítico de nuestro electorado”.
-¿Percibe que los ex partidos de la Concertación y ex Nueva Mayoría se terminaron por alejar de los sectores populares y sobre todo de la ruralidad?
“En la región de Coquimbo tenemos una dispersión geográfica que es exigente, pero sí existen los recursos para poder desplegarse, pero bajo esa lógica creo que el campo chileno y del norte chico siempre fue de un arraigo de izquierda, muy obrero, vinculación con el norte salitrero o del cobre, por lo tanto había un conocimiento mayor respecto de una votación de centro izquierda, sin embargo, hoy por hoy también hay un abandono consciente, porque sí se han hecho distintas gestiones en estos cuatro años para mejorar las condiciones de las personas que requerían autorización sanitaria para procesar sus productos del mundo caprino o del mundo de los olivos. De hecho, tenemos una política regional campesina que nunca se ha puesto en marcha. Existe la situación del agua que en la entrega no alcanza a ser suficiente y que no llega a los parámetros que la Organización Mundial de Salud lo plantea, pero tampoco tenemos las soluciones. El estado no llegó o llegó tarde, por lo tanto sí hay una deuda importante y que se cruza con la conversación política y la lejanía que hemos tenido de poder sintonizar. Por ejemplo, en Río Hurtado es abismante la votación que tuvo José Antonio Kast o en Combarbalá. Por eso creo que sí es importante tomar atención y nota de cómo se ha abandonado a la ruralidad por más que tenemos grupos parlamentarios vinculados a la agricultura familiar campesina. Sin embargo, está en las comisiones en tercera o segunda línea y que no es de gran interés y no le coloca mucha atención el ejecutivo o las autoridades pertinentes . Ahí hubo una desprolijidad de parte del Gobierno respecto de atender a la agricultura familiar campesina”.