El reciente diputado electo por la Región de Coquimbo destaca el apoyo que recibió de los sectores más apartados y delineó el trabajo que se desarrollará por este sector desde el parlamento y comprometió el apoyo en los temas más sensibles.
El ingeniero agrónomo, ex vocero de gobierno y ex jefe regional de la Subdere, Bernardo Salinas Maya (61) se transformó en diputado como independiente por el Partido Comunista en la Región de Coquimbo en las últimas elecciones parlamentarias del 16 de noviembre de 2025.
En entrevista con periodicoeldain.cl confiesa que gran parte del apoyo se lo debe a la ruralidad y a su labor que por décadas desarrolló en Indap y el Prodesal. Además, profundiza en su historia personal y los desafíos en su nuevo cargo. Admite que cultivó una cultura política de muy joven alimentada por el pasado político de su familia. “Una familia comunista”, remarca.
Nació en Santiago donde se conocieron sus progenitores. Su padre Belisario Salinas Jorquera militó en el PC con el escritor Pablo Neruda, mientras su abuelo Belisario Salinas Romero nació en La Serena y fue un destacado abogado y creador del Código Minero en Chile. En su momento militó en el partido Liberal y trascendió en el gobierno de José Manuel Balmaceda. “En los 200 años de la Corte Suprema lo destacan como uno de los abogados más destacados como creador del Código Minero”, establece.
Su madre Crimantina Maya nació en Tulahuén, comuna de Monte Patria, ligada a una comunidad agrícola, “mi abuela tenía ganado en el sector rural, vivía en la quebrada de Macano en Tulahuen y eso marcó en la mirada que uno tiene de desigualdad del campo y el sector urbano. Los padres de mi familia no tenían agua potable, alcantarillado ni luz eléctrica. Mi madre caminaba 18 kilómetros para llegar a la escuelita que hoy es la comisaría”, rememora.
Se ligó al Partido Comunista a los 13 años a finales de la década del ’70 en plena dictadura de Augusto Pinochet Ugarte siguiendo la influencia de su padre. “Él fue dirigente de la tercera comuna, ingresó al PC en 1932, después se fue de Chile e ingresa al ejército Norteamericano y lucha en la Segunda Guerra Mundial y al regresar a Chile fue dirigente sindical en Huachipato (…) En tiempos de Gabriel González Videla lo enviaron al campo de concentración de Pisagua, se tira del tren y se va a Argentina y vive el primer gobierno de Perón en Argentina y fue un luchador social”. Estudió Agronomía aunque no alcanzó a terminar, “pero fue un hombre muy inteligente y brillante. Escribía una columna en el diario El Siglo”, complementa.
El periodo de la dictadura de Augusto Pinochet Ugarte prefiere no recordarlo. Cambia su semblante. Solo asegura que enfrentó una experiencia de vida traumática. “Me torturaron, no se lo doy a nadie. Es un episodio de mi vida (no alcanza a terminar la frase) Me he ido sanando, pero ver la muerte al ser tan niño sin ninguna justificación. Sentir la muerte en la piel, ver la dictadura, me mataron compañeros. Vi cosas terribles. Mi señora con un fusil en la cabeza y 15 funcionarios de la CNI allanando la casa en Santiago”, puntualiza.
En 1986 salió de Chile con rumbo a Argentina y luego aterrizó en la Unión Soviética donde estuvo cerca de nueve años y posteriormente en Suecia, “recorrí varias partes del mundo, conocí los socialismo reales, vi cuando se cayó el Muro de Berlín, el comienzo de la guerra en Yugoslavia, cuando cae la Unión Soviética yo vivía pegado al Regimiento y salieron los tanques a la Plaza Roja, vi caer los modelos del socialismo”.
-¿Fue el momento que se cambió al Partido Socialista?
“No, había dejado de militar en el PC cuando regresé a Chile en 1993, comencé a validar mis estudios (Ingeniero Agrónomo) en la Universidad de Chile y empecé a trabajar en Investigación en el Inia, después postulé al Sag y estuve a cargo en el puerto de Valparaíso y después me fui al Servicio País a Vallenar. Regresé para trabajar en el programa de desarrollo rural donde conocí los programas de INDAP. Estuve a cargo de un Prodesal en la comuna del Monte y después postulo a jefe de área y vuelvo a la región como director provincial, luego jefe de fomento y posteriormente director regional de Indap”.
ANÁLISIS PROFUNDO
-¿Qué provocó su salida del Partido Comunista o no le gustó su rigidez?
“Le tengo el mayor respeto al Partido Comunista y va mucho con mi forma de ser, soy una persona ordenada, metódica, rigurosa, de principios y valores y con un contenido ideológico fuerte y potente. Soy un tipo de lectura teórica, la comprensión del mundo a partir de la dialéctica, de la tesis, antítesis y la síntesis, no creo esto de colocarle humanismo al capitalismo o al neoliberalismo. Jamás serán humanistas ni mucho menos le darán concesiones al mundo del trabajo”.
-¿Se considera marxista leninista?
“Absolutamente, pero también tomo mucho de Gramsci. Lenin decía que se podía tomar el poder por la fuerza y Gramsci plantea que se puede cambiar el modelo de trabajo desde la concientización de las bases”.
-¿Fue el camino que usted siguió?
“No, los momentos políticos son distintos. La crisis que vivía la Rusia Zarista al comienzo del siglo pasado llevó a un proceso violento de una revolución armada, pero después se desarrolla el pensamiento porque Gramsci también tiene la experiencia de morir preso en la cárcel en la Segunda Guerra Mundial, donde la guerra fue terrible y la violencia tan sobrecogedora por lo que dice que hay que comenzar a trabajar desde la base social y con la organización social. El cambio más complejo del mundo tiene que ver con la toma de conciencia. Si no tomamos conciencia que nos estamos acabando como especie, que ya no tenemos agua, que tenemos contaminación por un cambio climático severo por la acción del hombre y la sobreproducción que ha contaminado el planeta (…) Esta también es una lucha cultural y por lo que entendemos por paz social y en mi caso no he pretendido teorizar, sino que hablar con argumentos sólidos. Hay mucha improvisación en la política e ignorancia y no lo digo en forma peyorativa. No basta el pragmatismo del neoliberalismo para entender los cambios que tiene la sociedad. Claramente hoy día se está reordenando el mundo”.
-¿Para usted Venezuela es una dictadura, en Cuba hay dictadura o como lo indicó la candidata Jeannette Jara sería una democracia diferente?
“Es bien complejo analizarlo sin la pasión y sin los slogan porque cuando se pregunta de Venezuela o Cuba, por qué no preguntan si la democracia liberal de Estados Unidos es tan democracia. Que libertad para la participación de los migrantes que levantaron a Estados Unidos, el bipartidismo es una verdadera dictadura. Hay una libertad económica sin límites. Cuba nace de un proceso revolucionario de una dictadura que es distinto y Venezuela nace de un proyecto chavista que se distorsiona en el tiempo y lo que tiene Maduro no es lo que planteó Chavez quien tuvo 19 elecciones y la Constitución de Venezuela se hizo a través de un proceso constituyente. Para mí la dictadura fue la de Chile, sin ningún poder del Estado, con persecución, con gente del Estado matando a otros con una ideología de exterminio”.
-¿Y lo de Cuba que sería?
“Es una revolución socialista que ni siquiera es comunista porque el comunismo no existe en el mundo, hay una ignorancia. El comunismo es la abolición del Estado, de las clases sociales y de la propiedad privada, lo otro son modelos del socialismo. En Cuba existe el capital privado, hay una modificación de la Constitución Política de Cuba y una apertura desde el punto de vista del mercado. Se tendrá que extender por 60 años de bloqueo y, además, de un proceso revolucionario que llegó a derrocar la dictadura de Batista. Uno podría decir que queremos una democracia liberal, pero estas son verdaderas dictaduras de mercado. Tenemos los medios de comunicación monopólicos que no son neutros, nos forman a nuestros niños y jóvenes a través de una mirada neoliberal globalista sobre qué tenemos que pensar, comer y vestir. En Cuba hay procesos distintos, hay un proceso de elección en los barrios que a lo mejor no lo podemos entender”.
-En Venezuela se critica que Maduro no haya reconocido el ganador en las últimas elecciones presidenciales…
“Sí, que lamentable que no se haya transparentado, tenemos que acostumbrarnos a una democracia liberal como la que tiene Venezuela, donde el partido comunista es oposición a Maduro. Ahí existe el partido socialista unificado que gobierna Venezuela, lejos del partido comunista o de un modelo socialista. Lean el libro azul de Chávez que lo escribió diez años antes de tomarse el poder donde describe lo que él aporta a estos gobiernos progresistas, nadie sabe lo que pasó antes de Chávez en Venezuela y nadie se acuerda de las matanzas y el tiempo de Carlos Andrés Pérez. Sí tengo una crítica a Venezuela: no es Chávez”.
APELANDO A LOS
VALORES DE LA POLÍTICA
-¿Se pudo haber presentado antes a un proceso electoral en las urnas porque siempre estuvo en cargos directivos?
“A lo mejor tengo un espíritu kamikaze en alguna parte porque me presento en el peor momento de la política, presentarse con voto voluntario post estallido social había un contexto relativamente favorable, un feminismo fuerte y una necesidad de cambio profundo de la sociedad que se expresó. En cambio hoy día hay un contexto de una extrema derecha ocupando el miedo como un arma electoral y donde el desprestigio sobre la izquierda y el gobierno en particular porque no reconocen nada. Cuando empezamos a analizar el nivel de crecimiento que ha tenido el país, ha aumentado la inversión extranjera, bajamos la inflación, hicimos una reforma previsional extraordinaria, el copago cero y otras que no pudimos hacer, como la reforma a la salud que es tan necesaria. ¿Por qué no estuve antes (elección popular)? porque me la ofrecieron, porque soy muy exigente en la política”.
-¿Le ofrecieron alcaldías?
“Diputado y alcalde también, pero yo era muy exigente en la política porque para mí siempre la política son valores, principios, no recursos económicos, yo no compro conciencias. No creo en el clientelismo político”.
-¿Eso lo llevó a renunciar al partido socialista?
“No, renuncié porque mi hija Rayen Pojomovsky iba de candidata a concejala como independiente por el Partido Comunista, fue solo hace 5 años y me fui silenciosamente y le tengo el mayor respeto al PS y traté de ser lo más digno cuando me tocó representarlo”.
-¿Con esta candidatura al parlamento volvió a su casa del PC?
“Soy militante, secretario político de mi célula Víctor Hugo Rojas, lo que pasa es que no estoy inscrito en el Servel que es otra cosa distinta”.
LOS ESFUERZOS PARA IGUALAR LA CANCHA
-¿Dónde estará su sello como diputado por la Región de Coquimbo?
“En los ámbitos que mejor me he desarrollado que es la ruralidad, el tema hídrico para mí es un temazo. Es clave porque tiene que ver con la subsistencia en todos los aspectos y por otro lado hay que profundizar la descentralización. No es posible que sigamos teniendo un centralismo enfermizo, anacrónico. La región necesita más autonomía, capacidad de resolver sus temas internos, sus apuestas de desarrollo sin depender de las miradas hegemónicas del nivel central. Hay muchas leyes que tenemos que cambiar, lo otro tiene que ver con las políticas de vivienda, adultos mayores, es esencial porque hay un desamparo absoluto, el tema transporte, la conectividad, nos hablan de redes sociales y no tenemos ni internet. Tengo la experiencia de haber trabajado en la FAO en Bolivia donde lanzaron un satélite que le permitió a toda la ruralidad a tener acceso a la conectividad gratuita y de alta velocidad y democratizar, porque no es solamente chatear, sino que también se tiene acceso a la salud, los colegios rurales, la conexión ya no es un lujo, sino que es un derecho y permite hacer emprendimientos. Si un criancero tiene una majada maravillosa que es parte del turismo rural necesita que alguien se conecta para llegar al punto”.
-¿Cómo se desenvolverá en una eventual gobierno nacional de derecha?
“Si alguien que hace política no tiene la fuerza de la comunidad organizada la acción política termina siendo vacía. Tengo que hacer sentir que hay una comunidad que demanda algo, no lo demanda del parlamentario. En eso estaré en la primera línea, pero con la comunidad organizada. Si hablo del tema de seguridad hídrica o acceso al agua potable o saneamiento sanitario. Como he ejercido los cargos técnicos he construido una relación cívica más allá de la izquierda”.
-¿Cuánto se avanzó desde la Subdere para el saneamiento de los crianceros y que tuvieran resolución sanitaria?
“Ese es un tema clave, una política de Estado no puede depender de la voluntad de un tercero y en este caso no hubo voluntad del municipio de La Serena para llevar adelante un plan piloto y que lo queríamos hacer en Canela y Río Hurtado y teníamos una mesa de trabajo con el Servicio de Salud para que hiciera la inversión en cocinas, baños y el sistema de alcantarillado para que se pudieran certificar. Pero dependíamos de levantar la cartera de proyecto desde el municipio, al final terminamos golpeando a los crianceros”.
-¿Hacia dónde apuntan los proyectos de ley que pretende trabajar y presentar?
“Esta es una región que necesita tener estabilidad laboral y necesitamos crear empleos. El Estado no crea empleos, genera las condiciones para que existan, pero el 95 % lo da la pequeña y mediana empresa y el otro 3 % la gran empresa. En materia de emprendimiento, acá no tenemos un plan de industrialización en todos los niveles, sabiendo que producimos más del 50 % de las hortalizas a nivel nacional. Aquí es desarrollo económico local, desarrollo estratégico, atracción de inversión. Hay una excesiva burocracia, tenemos que hacer más eficiente al estado”.
-¿Incluye a la minería?
“Incluye todo, conocí la minería en Suecia, Finlandia donde los estándares para la minería son tremendamente altos, sino tiene que ver con que uno tenga una opinión negativa o positiva sobre el tema, Chile es un país minero, como lo vamos a desconocer, pero los estándares no puede ser desregularizados, tienen que ser altos porque la actividad tiene afectación en el entorno”.
-¿Con el proyecto Dominga se ha sido muy rígido, a pesar que plantean que poseen los estándares altos?
“Aquí hay que despolitizar sobre lo que significa Dominga, primero no hay que verlo con un sesgo político de ningún lado, ni tampoco soy partidario del modelo que tiene Dominga de comprarse a medio pueblo, es un modelo aberrante. El proyecto minero Dominga no es que se esté en contra de la minería, lo que pasa es que es insuficiente, yo lo leí, si fuera con todos los resguardos obviamente nadie podría oponerse”.
-¿Cómo reacciona frente al planteamiento que en la ruralidad en 35 años poco se ha avanzado?
“Es verdad, he ido a lugares que cada día están más despoblados y ahí planteaba de un plan estratégico para el mundo rural y que tiene que ver con repoblar el mundo rural, pero no con parcelas de agrado o ‘ghettos’, sino que habitarlo con los servicios básicos, alumbrado, conectividad, pero sin perder el carácter rural”.
-¿Pero, los jóvenes no parecen interesarse en la ruralidad?
“No están ni ahí, hoy el promedio de edad son 62 años, es grave, porque quien producirá alimentos, por lo que si queremos repoblar y hacer desarrollo, no podemos olvidar que tenemos un 97 % de ruralidad en la Región de Coquimbo, claro, los cortoplacistas lo ven como un bolsón electoral. Me recuerdo mucho lo que dijo el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic al señalar que estaba dispuesto a perder su reelección, pero trabajaría con quienes no habían sido el bolsón electoral, esa es la mirada. Al mundo rural no lo podemos ver como un bolsón electoral”.
-¿Está consciente que usted podría perder su reelección si se focaliza en un mundo sin peso electoral?
“Me da lo mismo, no estoy por el cargo en esto, sino que avanzar por las causas nobles, porque la política tiene que tener sentido, por qué dejamos de poner un programa de desarrollo sustentable en la ganadería caprina y sólo nos dedicamos a entregar plata y al asistencialismo del Estado”.
-¿Cuánto se coloca cuesta arriba su diputación si llega, por ejemplo, José Antonio Kast a La Moneda?
“Más que a nosotros o al ámbito político partidario, aquí hay un retroceso de la sociedad entera”.
-¿Cree que coloca en riesgo la democracia de Chile?
“Absolutamente, la democracia no es el acto mecánico de entregar un voto, sino que la certeza que tú tienes espacio para opinar sin persecución, estigmatización y el Estado tiene que garantizar los derechos. Como vas a sacar 6 mil millones de dólares”.
-¿Quedó frustrado del Gobierno de Boric, si bien no ha bajado del 30 %, pero tiene un alto rechazo?
“Creo que el rechazo a Boric es ideológico porque cuando recorro la región y le explico a la gente lo que se hizo y lo que no nos permitieron hacer, se sorprende porque la retórica de los medios de comunicación hegemónico establece que el país se está cayendo a pedazos, cuando nadie se recuerda que recibimos el país saliendo de una pandemia y post estallido social y tuvimos que reordenar las finanzas. Es tanta la cantinela que estos niños llegaron a improvisar”.
-¿Cuánto duele que se diga que este es un gobierno de ‘atorrantes’ o ‘parásitos’?
“Cuando se acaban los argumentos se cae en la descalificación, cuando uno coloca la impronta del miedo o las descalificaciones es porque ya no hay argumentos. Él (José Antonio Kast) cuánto parasitó en el parlamento, sin ninguna propuesta de ley y nadie lo podría llamar parásito, porque a lo mejor tuvo sus razones por no estar, no es lo que requiere la política. Jamás se debe llegar a la descalificación a colocar el odio como un argumento para descalificar”.
-¿Fue un error igual cuando Giorgio Jackson habló de la superioridad moral del Frente Amplio?
“Absolutamente equivocado, en la política no se prendió la luz con nadie, hubo una equivocación profunda en colocarse slogan, uno siempre tiene que trabajar callado con un discurso coherente. Lo que menos debe haber es la soberbia en la política, creerse dueño de la verdad o tener la receta perfecta, todas esas cosas hace un daño profundo a la democracia porque cuando no se concreta la gente se desilusiona”.
-¿Cuántas posibilidades tiene Jeannette Jara de llegar a La Moneda?
“Todas, esta es una segunda elección, es nueva, no tiene relación con la otra. La segunda vuelta de Boric con Kast, donde iba abajo, pero sacamos el 54%”.
-Pero, todos hablan del fantasma comunista y que Jara es el del PC…
“Lo que pasa es que en los medios hegemónicos establecen que el comunismo es lo peor que hay en el mundo y resulta que no existe comunismo en el mundo, pero sí sabemos lo que fue el nacismo y el fascismo y lo que ha generado la extrema derecha en sus países, una desigualdad profunda”.
CUÑA COMUNICACIONAL
-¿Le colocó muchas trabas el PC a su candidata Jeannette Jara?
“Aquí se colocó una cuña comunicacional, conozco a Lautaro Carmona del tiempo de la dictadura y a Daniel Jadue, trabajé en un momento con él y ninguno de ellos jamás por lealtad partidaria le generarían algún daño a la candidata, pero esto se hizo por querer colocar una división, siempre digo que hay traficantes de carne humana que pretenden hacer alguna carnicería, no había tremenda lealtad del partido con Jeannette”.
-También se acusó al gobierno que estaba en plena campaña con el mandatario Gabriel Boric…
“Le ayudó mucho a mostrarse en una reforma previsional que nadie se imaginaba que la podríamos haber logrado, tuvo una habilidad única y eso requiere método, prudencia y capacidad política, ceder para ganar y Boric le dio esa responsabilidad política tremenda, por lo que no es una mochila del gobierno, lo que pasa es que hoy día la retórica que tenemos para ganar es ocupando el miedo y que el país se está cayendo a pedazos”.
-¿Cómo se llegó a este proceso y con altas posibilidades que arribe al gobierno la extrema derecha?
“Es la misma pregunta que le hacemos a Europa, porque desde la Segunda Guerra Mundial donde tras al fascismo murieron 60 millones de personas y se crearon los estados de bienestar para proteger derechos sociales post guerra y por qué avanza la extrema derecha en Europa, por qué se pueden exacerbar los nacionalismos”.
-¿Se aburguesó la clase política y se desconectó con los más necesitados?
“No, estos son los últimos intentos que tiene el modelo de salvarse, el modelo de desarrollo en el mundo está fracasado. El neoliberalismo y la globalización está fracasada en este aspecto desde el punto de vista político”.
-¿No se prometió terminar con la desigualdad?
“Chile pasó de la extrema pobreza a avanzar rapidísimo en indicadores de desarrollo humano extraordinarios en Chile, el nivel de escolaridad, natalidad y vivienda, por lo que durante mucho tiempo se ha ido logrando. Lo que pasa es que hoy día los argumentos de la extrema derecha es primero contra la migración, los capitales se globalizaron tanto que ya no tienen control y sienten que hay una hegemonía de pensamiento del sur global, versus el norte global y aparecen estos nacionalismos extremos”.
-¿Cuál es el proyecto personal que dejó detenido por el parlamento?
“Había decidido trabajar en otra cosa más tranquilo, cumplo 61 años y toda una vida guerreando y me traje a mi madre a vivir conmigo con 88 años y quiero que muera conmigo, porque ella me parió sola, cuando llegó la ambulancia ya había cortado el cordón umbilical porque al vivir en una comunidad agrícola era partera”.
-¿Con la diputación cierra un ciclo político?
“Sí, aunque no lo busqué y no fui a pedir cargos ni a pelear con nadie, ni tampoco me fui a ofrecer, por lo que siento que hay un reconocimiento a mi trabajo, trayectoria y consecuencia, pero por las coyunturas de la vida estoy aquí. Queremos hacer un buen trabajo consciente y honesto y que trascienda, esto no es un tema personal. No es la firma de un contrato de trabajo y el sueldo a fin de mes, sino que me interesa aportar con la experiencia. Conozco la región de Coquimbo profunda, no esta política de café, ofrezco mucho terreno y decir la verdad siempre, no usar el cargo y siempre representar a quienes pusieron la confianza en mí”.
